7- AUSCHWITZ -CRACOVIA (17/04/2014)

• AUSCHWITZ

Como estaba previsto que este día visitaría el campo de concentración de Auschwitz y la idea era aprovechar el día.

 La verdad es que me parecía muy pronto, pero a las 8:05 ya estaba en la puerta, curiosamente no había casi nadie, solo vino un joven  para decirme que aparcase la moto en la acera dentro del parking. Eso sí los 8 Kz se pagan, por lo menos son amables y con la fascinación  de ver una moto y a uno que la conduce desde tan lejos se crea una corriente de simpatía, te pregunta algo y te dice que el precio es "ocho" (en español), la verdad es que es un detalle que resulta muy agradable. Así que le correspondí pidiendole que me explicase como se dice gracias en polaco, es algo así como yínkuia .

Si lo empleas te entiende y siempre es bien recibido, además cuesta tampoco.

La entrada al campo es muy austera y el primer tema es que la guía en español empezaba a las 10:30, la verdad es que no me interesaba, la sorpresa es que sin guía el acceso es gratis.

En principio no me apetecía tener ninguna guía e ir a mi aire, prefiero enterarme de menos detalles y sentir más lo que aquello fue. 

Además sin ningún ritmo macado, tal y como  me fue apeteciendo.

Que decir de una visita así, solo que duele, que te pone triste, pero que no recomendaría a nadie que lo vea aunque mi opción personal es que se debe ver. Es importante no olvidar porque  la mucha barbarie y locura  que supuso no se puede repetir. Ese complejo de inferioridad nazi se deja ver en su forma de actuar, también e igualmente terrible, la organización, la disciplina, la meticulosidad, a la hora de matar, torturar, reprimir,... pero eso es el producto de la forma de actuar el pueblo alemán que como complices escrupulosos y obedientes, cerraron la mordaza del genocidio.

Al final sales triste y conmovido, de echo son 2 campamentos y después del primero ya tuve claro que no quería seguir viendo más.
 Lectura complementaria a la visita al campo
Este enlace que os he puesto considero que es una lectura muy importante si se quiere entender algo más de aquella locura que nunca debieramos olvidar.

• CRACOVIA

Vuelvo a Cracovia, ida y vuelta son 140 kms. así que a las 12:00 ya estaba en el hotel.

Ahora vamos a empezar a visitar la ciudad, es una ciudad agradable y perfecta para pasear.
Ayer cuando llegué metí la moto en el aparcamiento del hotel que es al aire libre y super pequeño, cabrán unos 9 coches, pero como entré detrás de un taxi pasé directamente. Además tuve la precaución de preguntar a uno de los empleados si había algún problema en dejarla, ya había elegido un lateral solo apto para moto. Su respuesta que no y ¡Ah bendita moto! ¿qué si es la 1.600 ? Esa simpatía hacia los tirados de la moto abre puertas ( y aparcamienos restringidos)
De hecho hoy mirar lo que había:

 Son unos señores, ostentosos ellos, que pintan en el capó el viaje que están haciendo, para mi que no van precisamente de incógnito.
Van la parejita y los he visto circular y tienen aspecto, bueno aspecto.

El centro es pequeño y se hace todo a pie.

Fuimos a Información turística y nos dieron  la recomendación de un par de restaurantes que fue un éxito, se llama

Pod Aniolami (www.podaniolami.pl)

El sitio merece la pena disfrutarse por decoración y por la comida, además empezamos a tomar los primeros Pirogie (Dumplings en inglés)   que es una pasta que envuelve queso o carne y está muy rica.

La entrada es poco atractiva, un pasillo largo en zigzag que tampoco invita demasiado. Al final del "tunel" tienen un patio cubierto muy bonito, tanto es así que directamente optamos por quedarno ahí. Nos ofrecieron bajar al sótano y ni nos lo planteamos.

Por suerte, mientras nos preparaban la comida se me ocurrió buscar el baño y bajé para ver como era. Precioso, en primer lugar parece más una cueva que un sótano porque la altura es considerable ( 4-5 metros) además tienen unos motivos decorativos muy singulares y con mucho gusto. Creo que os gustarán las fotos.
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Después de comer fuimos a comprar entradas para un recital de un coro local el teatro Filarmónica, teníamos interés en asistir a algún concierto o similar y comiendo descubrí que era posible en ese día.

Así que nos fuimos para sacar las entradas. 

En Cracovia tienen unos carritos eléctricos para hacer recorridos turísticos, está muy bien porque va cerrado por plástico transparente por todas partes y te van poniendo una cinta en tu idioma y recorres, junto con la explicación, toda la zona más visitable.
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Suena muy "guiri" pero desde que descubrí el de Madrid me hice forofo, parece mentira la cantidad de cosas interesantes que desconoces de una ciudad, aunque hayas vivido en ella 4 años.

Cuando ivamos para sacar las entradas del recital nos abordo un polaco ofreciendonos el servicio, muy amable y correcto. Primero dijimos que a la vuelta de las entradas y entonces se ofreció a parar en la visita para comprarla. ¡Buen argumento de venta! Así es imposible no cerrar la venta, y nos la cerro.

Salimos al rato en el cochecito para nosotros solos conduciendo él y con el sonido explicativo. El problema es que empezó a fallar la audición, vino el encargado corriendo y como no podían arreglarlo mientras nos  cambiaban el carrito fuimos a comprar las entradas (estaba a 50 metros)

En ese momento fue cuando vimos lo interesante que es tener guía propio. El chaval pidió las entradas y primero que no quedaban y luego que solo quedaban dos. Incluso no enseñaron en un monitor cual era la ubicación, osea nada que suene raro. 

Estas dos entradas que quedaban había que ir a otra oficina que el no conocía, pero estaba a 100 metros, subimos andando, preguntó en donde le habían dicho y luego tuvimos que pasar al interior del edificio.

Vamos que si no es por el guía todavía estamos buscando las entrada.

La visita está bien, te dan un montón de información y tienes una panorámica muy completa de que ver y su pequeña historia. Luego queda hacer a pie lo que te haya interesado.

El recorrido fue completo, casco antiguo, barrio judío,  gueto y localización de donde se filmó la lista Schlinder.

Los dos últimos tienen poco interés. En cuanto al gueto, afortunadamente, no queda nada, solo la farmacia donde .... y el sitio (que se puede visitar) de donde se rodó la película aunque está de moda, no entiendo como puede tener tanto tirón. Hace tiempo nos recomendaron en Tunez hacer una excursión para ver el sitio donde se rodó la Guerra de las Galaxias, como son cosas que no entiendo no lo comento demasiado, pero ir al desierto a eso "manda güevos", pero lo respeto.

Al final del recorrido, incluso nos ofreció dejarnos en el hotel, más amabilidad no se puede pedir.

Por la noche concierto, estuvo bien aunque el teatro es  raro, como se llama Filarmónica te esperas algo monumental y está más cerca del teatro de toda la vida de Almagro que de otra cosa, eso sí algo más grande. Aunque proporcionalmente el nuestro es más grande.